El moldeo por inyección es un proceso de fabricación muy versátil que se puede utilizar para producir una amplia gama de piezas de plástico en grandes cantidades.Sin embargo, no siempre es la mejor opción para cada aplicación.Aquí hay algunos factores a considerar al decidir si usar el moldeo por inyección en lugar de otros procesos.
Volumen de producción: El moldeo por inyección es más rentable para series de producción de alto volumen, normalmente en miles o millones de piezas.Para tiradas de producción de bajo volumen, los procesos como la impresión 3D o el mecanizado CNC pueden ser más rentables.
Complejidad de la pieza: El moldeo por inyección es ideal para producir piezas con geometrías complejas y dimensiones precisas.Si la pieza tiene una geometría simple o no requiere tolerancias estrictas, otros procesos, como la formación al vacío o el moldeo por soplado, pueden ser más adecuados.
Selección de materiales: El moldeo por inyección permite utilizar una amplia gama de materiales plásticos, incluidos termoplásticos, plásticos termoendurecibles y elastómeros.Si la pieza requiere un material específico que no se puede procesar mediante moldeo por inyección, es posible que se deban considerar otros procesos.
Acabado de la superficie: El moldeo por inyección puede producir piezas con un acabado superficial de alta calidad, pero si se requiere un acabado superficial específico que no se puede lograr mediante el moldeo por inyección, pueden ser necesarios otros procesos, como pintura o revestimiento.
Costos de herramientas: El moldeo por inyección requiere la creación de un molde, lo que puede ser costoso, especialmente para series de producción de bajo volumen.Otros procesos, como la impresión 3D o el mecanizado CNC, no requieren herramientas, lo que los hace más rentables para tiradas de bajo volumen.